"Sentada en el viejo
columpio
con el chirriar de
las cadenas.
Mis pies se elevan
del suelo,
mientras desean
rozar el cielo.
Nubes blancas,
compactas y suaves,
se entremezclan con
los mechones de pelo
que acompasan mi
rítmico columpiar.
Un lazo se ha
desprendido de mi cabello y
parece flotar en el
aire mientras su destino es
caer, hasta el
final.
Una risa quiere escapar con el viento,
dibujar una
sonrisa sobre rojos labios
y pequeñas arrugas
en ojos cerrados.
Subo y subo,
columpiada entre
rayados barrotes
que muestran marcas
pasadas,
como ecuaciones
sobre un papel,
la clave se esconde
en ellos,
de alcanzar la libertad ansiada.
Alas que quieren
desgarrar este miedo,
con la facilidad con
la que se quiebran las hojas.
Un suspiro. Freno.
Mis pies pesados de nuevo sobre el suelo"
Un suspiro. Freno.
Mis pies pesados de nuevo sobre el suelo"
-Guardiana de Libros (Sara)-
Precioso, Sara.
ResponderEliminarMuestras con talento un momento de enajenación, de deleite pasajero, antes de volver a pisar tierra. Me gusta cómo lo expresaste.
Un beso ;)
Bonitas palabras :)
ResponderEliminarSaludos